El 63 % de los adultos mayores esperan más de una hora para la atención médica
Este dato surge del Informe "Atención a Personas Mayores" realizado por el Defensor del Pueblo Mario Decara a través del Instituto de Género y Promoción de la Igualdad.

Durante los meses de agosto y septiembre de 2022, el quipo técnico y profesional de la Defensoría del Pueblo, llevó a cabo el informe "Atención a Personas Mayores". Un diagnóstico para el derecho al buen trato. Este estudio, tuvo como fin conocer las valoraciones de los adultos mayores en relación al trato y atención que reciben en las instituciones públicas y privadas de la ciudad de Córdoba (bancos, comercios, organismos estatales y sistema de salud).  Para tal fin se encuestaron a 400 personas mayores de 65 años, quienes brindaron información útil para Identificar prácticas de maltrato en base a las experiencias que tuvieron en el último año.

 

Adultos mayores, gestionar y atender la salud

La salud es una dimensión relevante para esta población ya que ocupa un lugar central en la vida de los mayores quienes requieren consultas médicas frecuentes, intervenciones especializadas y en ocasiones, urgencias. En este sentido, el ámbito de la salud fue seleccionado para analizar las formas de atención y trato hacia la población de mayor edad.

Ante la pregunta sobre los tiempos de espera cuando acuden a una consulta médica el 19.5 %  respondió que por lo general espera  más de una hora, mientras que el 43 % mencionó que a veces debe esperar ese tiempo entre consultas. Si se tienen en cuenta estas proporciones de manera acumulada, el 63 % del sector en referencia suele esperar más de una hora en las reiteradas consultas médicas.

Otro de los datos que alarma señala que la principal dificultad para la atención medica está relacionada con la gestión de turnos, el 43.3 % señaló que tiene complicaciones para la obtención de estos. Refieren que la principal traba se vincula con la demora de las citas para especialidades médicas particularmente vinculadas a los servicios que presta PAMI.  Esto ocasiona que la recetas o pedidos de los estudios caduquen, lo que implica que los pacientes deben comenzar nuevamente el proceso con el médico clínico o de cabecera para que este haga una vez más la orden y lo vuelva a derivar.

Otro aspecto de este estudio abordó sobre la modalidad para sacar los turnos, el 69, 4 % señaló que lo realizó por teléfono, mientras que el 20, 3 % acude de manera presencial, solo un 6, 8 % indico que lo saca virtual a través página web.

En relación a la atención médica y al trato que reciben durante las consultas con profesionales de la salud, más del 75 % calificó la atención como muy cordial ya que considera que el personal es amable y paciente con los mayores. No obstante, el 20 % reconoce que cuando va acompañada de otras personas (mayormente hijos/as) el trato que reciben es más amable, paciente y comprensivo.

El trato en comercios y bancos

Más de la mitad de las personas mayores de 65 años no tiene una atención preferencial o prioritaria en ámbitos comerciales.  Principalmente en los supermercados se identificaron muchas dificultades: cartelería no acorde a la visión, productos ubicados en lugares inaccesibles y elementos que entorpecen el paso, entre otros.

En cuanto a la atención en entidades bancarias se destaca que el 45 % hace filas de más de una hora para cobrar, la espera es a la intemperie sin la posibilidad de estar sentado/a y no cuentan con asistencia para el uso del cajero. El 68 % afirmó que no sabe utilizar la aplicación o web del banco y más de la mitad no sane manejar el cajero automática de manera autónoma.

Repensar las prácticas hacia los adultos mayores

Desde hace años el Defensor del Pueblo Mario Decara, realiza estudios acerca de la situación actual de la población adulta mayor de la ciudad de Córdoba, con el propósito de brindar un diagnóstico permanente sobre los problemas, necesidades y dificultades que afrontan en diversas áreas de la cotidianeidad.

Los datos obtenidos en el Informe Atención a Personas Mayores, ponen de manifiesto la urgencia de repensar el trato en sentido que las relaciones humanas que se establecen con las personas mayores implica mirar también una serie de condiciones que incidan positivamente en la atención, como la disposición de los espacios, los tiempos que suponen sus gestiones o trámites, los canales y medios que se utilizan para la información y comunicación, entre otros aspectos que pueden funcionar como barreras o facilitadores para una atención de calidad y respetuosa de los derechos de las personas.